El presidente de los Estados Unidos Donald Trump anunció ayer la imposición de tarifas a la importación de acero por 25% y a la importación de aluminio por 10%. Esto significa que si antes compraban el acero mexicano a 100 dólares, ahora lo comprarían a 125 dólares.
La Casa Blanca aún no ha confirmado la lista de países a los que se aplicará la tarifa, aunque pareciera ser que aplicará para todos.
Estados Unidos es el mayor importador de acero en el Mundo con 26.9 millones de toneladas importadas el año pasado hasta septiembre. Entre los países a los que compra, México ocupa el cuarto lugar, sólo por detrás de Canadá, Brasil y Corea del Sur.
La decisión de Donald Trump pondría en riesgo la forma de vida de cientos de miles de trabajadores del acero y podría tener consecuencias devastadoras en la economía mexicana.
EEUU compra a México el 9.4 por ciento de su acero, lo que representan 2.53 millones de toneladas. Esto representó el 72.9% de las exportaciones de acero de México en el año 2016.
México produce en total 18.8 millones de toneladas de acero por año y empleó el año pasado a más de 100 mil personas en la industria. Además, la industria del acero representa el 1.9% del PIB nacional y el 6.2% del PIB industrial.
La decisión de Donald Trump podría tener motivaciones políticas, pues los estados del llamado Rust Belt normalmente son muy importantes en las elecciones y sus empleos dependen en gran medida de la salud de la industria del acero doméstica.