Diputados de Morena aprueban a Del Mazo miles de millones en créditos y ahora chillan por la deuda.

Durante el liderazgo de Maurilio Hernández en la Legislatura Mexiquense, los diputados morenistas aprobaron miles de millones de pesos en créditos solicitados por Alfredo Del Mazo. Desde ahí la cosa está grave pues a nivel nacional era una política de Morena evitar endeudamiento público. Pero ahora, para lavarse la cara, hacen teatro y salen a gritar y chillar desde tribuna contra el endeudamiento y mal manejo de los recursos. La verdad, el pueblo mexiquense no requiere tanto aullido, cuando nada más se necesitaba no levantar el dedote para autorizar los créditos. Así de sencillo. Así, de simple. No quieres hablar de la pésima deuda de Del Mazo, pues no la apruebes.

Esta es la prueba de lo anterior: La Constitución del Estado de México establece de manera clara, precisa y sin rodeos que Del Mazo no puede pedir prestado si no cuenta con la autorización de la Legislatura. Vea el lector el contenido del artículo 61 fracción XXXVII de la Constitución:

«Es Facultad y Obligación de la Legislatura autorizar por el voto de las dos terceras partes de sus miembros presentes los montos máximos para en las mejores condiciones del mercado, contratar empréstitos y obligaciones por parte del Estado, municipios, sus organismos auxiliares y autónomos, así como cualquier otro ente sobre el que tengan control respecto de sus decisiones o acciones, previo análisis de su destino, capacidad de pago y, en su caso, el otorgamiento de garantía o el establecimiento de la fuente de pago, de conformidad con las bases establecidas en las leyes de la materia».

El coordinador de Morena en la Legislatura del Estado de México, el tristemente célebre Maurilio Hernández, ha convertido al congreso mexiquense en «el alcahuete» del gobierno de Alfredo del Mazo. Trae un acuerdo con el gobernador que consiste en lo siguiente: tú sigue haciendo cuanta porquería quieras, no te preocupes jefe, los diputados de Morena van a dejar pasar todo. Y existe un anexo en el acuerdo: nada más públicamente dame chance de criticarte, declarar y pegar gritos.

Dentro de este esquema se deben entender las disque comparecencias del gabinete de Alfredo del Mazo ante la Legislatura del Estado de México para, dicen ellos, aclarar temas del informe de gobierno. En realidad esas comparecencias son ruido y escándalo, pero en la práctica no hay ninguna acción concreta. A cada rato usted ve subir a los morenistas a la tribuna y en tono indignado hablan del mal gobierno, los desvíos, la falta de servicio, la inseguridad y cuanta porquería se les ocurre. Ponen cara de ira y se dan golpes de pecho. Alguien diría que son buenos actores, otros sencillamente que son bastante cínicos.

Todo es un teatro acordado entre priistas y Maurilio Hernández. El guion del entarimado es el mismo de cada año: se acusa públicamente de toda porquería al gobierno, pero en la práctica no hacen nada. Es decir, la escandalera de Maurilio y grupo sirve nada más para limpiarse la cara por su complicidad con la clase en el poder.

Del tema de la deuda ya vimos la incongruencia, pero ahora pregúntese el lector, por ejemplo, ¿por qué Alfredo del Mazo no acude ante el Congreso del Estado de México a rendir cuentas? ¿Por qué su informe lo hace en el palacio del poder Ejecutivo y no en el palacio del Poder Legislativo? Maurilio no tiene ningún pretexto para que esto siga sucediendo, ninguno. Durante la LX Legislatura fue el máximo líder de Morena, con todo el poder. Contó con la fuerza para operar junto con sus aliados hasta 51 votos, mientras los priistas y compañía máximo llegaban a 24 votos. Es decir, Maurilio y compañía tenían la fuerza para reformar la Constitución si pedir permiso a nadie. Y en este tema de la comparecencia de Del Mazo, reformar la ley para obligar al ejecutivo mexiquense a presentarse ante el poder legislativo era lo más sencillo. Cinco minutos y se aprobaba.

Y aún tienen el descaro de salir a quejarse de que Del Mazo no asiste al Congreso y las comparecencias del gabinete no están bien reguladas: pues que se quejan, si ustedes lo permitieron…son cómplices de lo mismo que acusan.

Y entre más quiere Maurilio acusar de ineficiente y desviador de recursos al Gobierno de Del Mazo, peor se ve. Se la pasan gritando «al ladrón, al ladrón», pero todos los días miran para otro lado. El pueblo les dio el poder para frenar esas desviaciones: ¿por qué no lo hacen? No se requiere verborrea, se necesitan hechos. Los abuelos tienen un dicho para quien mucho ladra. ¿lo recuerda usted?

Y la gente se pregunta: ¿por qué Maurilio no es llamado a cuentas por el Consejo Estatal de Morena y la aguerrida militancia de ese partido. Sencillo, porque el jovencito también es presidente del Consejo Estatal de Morena y aún cuando por ley debe citar a reunión cada tres meses, desde hace más de dos años no lo hace. Y además, Morena es el único partido del Estado de México sin presidente del Comité Ejecutivo Estatal. Si usted quiere que esto siga pasando, no comparta. Columna cuentos y cuentas. Escribe Edmundo Cancino. (En la gráfica Maurilio posa orgulloso con el Secretario de Finanzas de Del Mazo)